DÍA DE LA MADRE
Con unos brotes de lavanda y romero vas a tener a tu madre encantada. Son populares los “poderes” relajantes de esas plantas, también muy decorativas. Y si pones un aceite esencial con palitos difusores, será un magnífico ambientador para un sitio pequeño como el baño.
Es una manualidad sencilla y vistosa, y además de un regalo para el día de la madre puede servir perfectamente como detalle “para todo” y también para ti.
Puede ser realizada por niños.
Con esto haces las casitas 
MATERIALES:
- Casita de madera con tubo (a la venta en breve)
- Pintura acrílica
- Pincel
- Lija
- Cordón o cualquier cinta para lazada
OPCIONAL:
- Unos brotes de lavanda, romero…
- Palitos para perfumar
- Aceite esencial
ELABORACIÓN
- Pintar la casita del color que más te guste, por ambas caras, solo por una, en fin, a tu gusto. También puedes forrar una cara con papel para decoupage, en este caso tienes que dar una mano de pintura blanca para que resalte el papel.
- Si has pintado alguna zona sin querer, sobre todo los bordes, no pasa nada, cuando la pintura esté bien seca pasas un poco la lija y desaparecerán las imperfecciones.
- Ahora la envuelves con un cordón a tu gusto y haces una lazada
- Por último, puedes poner unas flores de lavanda o romero (son muy aromáticas) en el tubito con agua.
- También puedes rellenar el tubo con alguna esencia y poner palitos difusores, se venden en el supermercado.
