Descripción
La bentonita es un tipo de arcilla de origen volcánico que en contacto con agua se comporta de forma coloidal, esto quiere decir que forma una solución de apariencia líquida pero con partículas microscopicas insolubles en suspensión, la mayonesa o la leche son ejemplos de soluciones coloidales.
Por esta propiedad y su alta plasticidad la bentonita se añade tanto en arcillas como en esmaltes, como arcilla, por si misma, no puede ser usada: su alta tasa de absorción de agua provoca una gran expansión del volumen cuando se humedece, al secarse sucede lo inverso, una gran perdida de volumen que ocasionará grietas con facilidad. A la vez, resulta enganchosa y gelatinosa.
Existen diferentes tipos de bentonita que se clasifican según su composición, pero la que se encuentra como suministro cerámico suele ser predominante en sodio, a pesar de tener una composición inexacta y seguramente variable no se añade a los esmaltes por sus propiedades químicas, sino por sus propiedades físicas:
En pequeñas cantidades resulta una material muy preciado para el ceramista e imprescindible en la industria, en barros y arcillas una adición de entre 1-2% aumentará su plasticidad. En los esmaltes se añade como suspensivo, haciendo mucho más fácil la aplicación, se trabaja mejor si se añade y se mezcla con el esmalte en seco, antes de añadir el agua, para estos usos se suele adicionar en una proporción que no pasa del 3%. Dependiendo de su origen contiene más o menos hierro, por ello puede modificar ligeramente los tonos de los esmaltes y las pastas a las que se adiciona.